El comienzo del Open de Australia podría pasar de su fecha tradicional, en la segunda semana de febrero, al 1 de febrero. El motivo, según publica el Sidney Morning Herald, es la cuarentena de dos semanas que las autoridades australianas, en concreto las del estado de Victoria, donde se ubica Melbourne, sede de la cita, tienen pensado imponer a los tenistas.

Si se pretendiese empezar el 18 de enero, como estaba previsto, los jugadores tendrían que llegar muy pronto a Australia, además en fechas festivas. Por eso los organizadores, asegura el diario australiano, han ido informando a los participantes de que la cita probablemente comenzará la primera semana de febrero.

Según la misma información, se les habría dado de plazo "a más tardar hasta el 7 de enero" para comparecer y poder pasar la cuarentena pertinente. Por otro lado, tanto la WTA como la ATP aún tienen que anunciar que torneos preliminares marcarán el camino hacia el primer Grand Slam del año.